Ricardo del Arco y Garay (1888-1955) dedicó parte de su vida a recopilar datos sobre nuestra ciudad, allá por los años cincuenta del siglo anterior. Nació en Granada en 27 de abril de 1888. Su abuelo paterno, José María del Arco, era oriundo del pueblo aragonés de Borja.
Pasó su infancia en Tarragona, en cuyo Instituto finalizó sus estudios de bachiller y pasó al cursar Letras a la Universidad de Valencia, donde se licenció en Ciencias Históricas en 1907. Opositó con éxito como Facultativo de Archivos, Bibliotecas y Museos en 1908 y fue trasladado a Huesca. El joven Ricardo del Arco llegó a la capital oscense como archivero de Hacienda, interesándose de inmediato por la cultura de Huesca y de Aragón.
Recorrió todos los fondos de la capital tomando notas y, de inmediato, visitó todos los monumentos de su entorno. Sus resultados los remitió al Boletín de la Academia de Historia, y empezó sus primeras publicaciones en Huesca.
En 1911 contrajo matrimonio en la capital oscense con doña Luisa Fortuño, hija de una antigua familia nobiliaria, de quien nacería un hijo varón. La vitalidad de don Ricardo Del Arco hizo que fuera elegido cronista oficial de Huesca en agosto de 1912. Era su oportunidad para recorrer los fondos de la Universidad Sertoriana o los del Archivo Municipal Oscense, o los del Archivo Capitular de su catedral. Llegó a desempeñar el cargo de delegado provincial de Bellas Artes y Excavaciones, así como el de la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Sus publicaciones históricas, literarias, periodísticas y arqueológicas se multiplicaron sin descanso.
En 1914 fue nombrado profesor del Instituto General Técnico, instalado en la antigua Universidad Sertoriana, y en 1915, elegido director de la Biblioteca Pública y Jefe de la Biblioteca Provincial. Sus aspiraciones culturales se ampliaron notablemente y comenzó su recorrido por los archivos parroquiales y los fondos sobre monasterios oscenses depositados en el Archivo Histórico Nacional.
Acabada la Guerra Civil Española, incansable y apasionado por la cultura de Aragón, en especial por la provincia de Huesca, amplió sus búsquedas en los archivos de la Corona de Aragón de Barcelona, la Biblioteca Nacional de Madrid, el Archivo Histórico Nacional, el Archivo y Biblioteca del Palacio Real y la Real Academia de Historia.
Animado por el gobernador de Huesca en los años cincuenta -señor Fragoso del Toro-, recorrió los archivos municipales de Fraga, Almudévar, Casbas, Jaca, Tamarite, Binéfar, Monzón… sobre los que compuso trabajos de Historia de dichas localidades, siempre sufragadas por los ayuntamientos respectivos. Falleció en la tarde del día 7 de julio de 1955, atropellado por un carro, cuando intentaba cruzar la plaza de Navarra en la capital de la provincia.
La asociación fragatina La Casa de Fraga le hará un homenaje estas navidades en Barcelona, el domingo 13 de diciembre, sacando a la luz la historia que dejó escrita sobre Fraga.
La Casa de Fraga en Barcelona