A pesar de múltiple variedad de escudos de Fraga, motivados por el desconocimiento de las características originales de nuestro escudo, o por interpretaciones partidistas en el devenir de nuestra historia, debe tenerse presente que una vez fijado, debe presidir todas las instituciones o difusiones lúdico-culturales referidas a nuestra ciudad.
El escudo de Fraga ya existía antes de 1719, representado por una planta verde con raíces y las cuatro barras, tal como constan en las monedas pugesas de Fraga autorizadas entre 1334-1348. No fue hasta 1710 que se autorizó la modificación del escudo de Fraga, por privilegio del rey Felipe V, ahora hace 300 años.
La citada moneda pugesa volvió a emitirse en 1399, obligando el privilegio de aquel año a tener grabado el escudo de la villa en la misma. Por el anverso poseía «... una planta con raíces», por el reverso las cuatro barras. Se sabe que este escudo estuvo grabado en algunas fitas de delimitación del término de Fraga, o en las paredes de la capilla de San Antonio de la iglesia de San Pedro de Fraga.
El nuevo escudo modificado tal como preside la fachada del edificio que sirvió de Ayuntamiento desde 1955 en la plaza de España, fue trasladado a esta plaza desde la fachada del palacio Montcada que lo presidió desde 1719.
Los TRECE privilegios de Fraga más conocidos:
- Sentarse en Cortes junto a Zaragoza y Tarazona.
- Título de Ciudad de Fraga en vez de villa.
- Modificar el escudo (Lis, Fidelísima y Vencedora).
- Voto decisivo en Cortes.
- Cabeza de Partido.
- Nombrar doce regidores, ocho de la nobleza.
- Venta directa de productos locales.
- Empleos públicos y militares para hijos de la villa.
- Clérigos de Fraga con preferencia a hijos de la villa.
- Celebrar dos Ferias al año de ocho días.
- Organizar un mercado al mes, sin impuestos.
- Cobrar el paso del puente.
- Franquicia de la Media Annata (para funcionarios).
- Franquicia en las tierras cargadas a censo real.
Los NUEVE privilegios menos conocidos:
- Perdón de deudas de la villa anteriores a la Guerra.
- Confirmación de privilegios antiguos de la villa.
- Cabeza de Corregimiento en Aragón.
- Bienes de fragatinos intocables en delitos ordinarios.
- Cabeza de Provincia.
- Libres de alojamientos militares en sus casas.
- La Ciudad podría formar sus propias quintas.
- Libertad del impuesto llamado quinto real.
- No usar tormento en interrogatorios judiciales.
¿Seremos capaces de recuperar la forma original del escudo y conservar la memoria de los privilegios?
Según la terminología heráldica, el escudo de Fraga corresponde al representado de la forma siguiente:
Escudo partido en pal con las barras de la Corona de Aragón en el primer cuartel; en el segundo cuartel en plata una planta verde o de sínople. Brochante sobre el todo un escudo de azur con la flor de lis en oro. En la bordura, de plata, la leyenda: Vencedora y Fidelísima Ciudad de Fraga, en letras de sable. Y como timbre del escudo la Corona Real.
La presencia del murciélago o rat penat, como en el escudo de Valencia, consta en numerosas versiones posteriores, sin que tengamos todavía noticia de su concesión. Creemos que la planta y el murciélago ya existían en los escudos anteriores a la concesión borbónica. En cualquier caso, ese mamífero alado es símbolo heráldico de estar vigilante, de ser previsor.
Joaquín Salleras Clarió